sábado, 31 de marzo de 2012

Marató de Barcelona 2012

Noche de stress... cambio al horario de verano! ¿Mi móvil la cambia sola? Si la cambio yo, ¿qué hará? ¿Me quedaré dormido? Creo que me desperté como 15 veces a mirar el despertador, el móvil... pero aún así, tuve la sensación de haber podido descansar bastante.
Lo tenía todo preparado sobre la mesa del comedor: mallas, camiseta, calcetines, cremas, dorsal, Powerbomb, las voladoras con el chip, las gafas de sol, las barritas, el pulsómetro... una lista inacabable de ítems. De hecho, la lista ya la debo tener tatuada en alguna parte de mi cerebro.
Pip pip pip piiiip, pip pip pip piiiiip... ui! Es la hora!!
Ducha calentita, agua fría en las piernas y reactivado!! Las cosas están colocadas en el orden adecuado para ir poniéndomelas en ese orden. Habitualmente, con las prisas intercambio el orden: la camiseta antes que el pulsómetro, los calcetines antes que la crema...

Debería desayunar algo, pero no tengo hambre. Así que me como un par de barritas de cereales, por meter algo en el cuerpo. Cierro la mochila, cierro el piso, entro en el coche. Uff! Empiezo a estar nervioso!
Hasta ahora no lo había estado. Algo que me alegra o me aterra, no lo sé! También estaba tranquilo cuando hice la Maratón del Aneto, pero de repente me dió un bajón y me rompí, la carrera se fue al carajo, me lesioné... un auténtico desastre. Me vino ese recuerdo mientras salía del parking e iba hasta casa de Ricard, a 200m. Intenté tranquilizarme, creo que lo conseguí. Mi mente estaba tranquila, mi cuerpo decentemente a punto... y mi corazón a tope! Pulsómetro a 115ppm sentado en el coche.
Ricard también estaba nerviosillo, era su primera maratón. Bueno, la mía casi también. La última vez que corrí una de asfalto fue hace 20 años, también en Barcelona.
Aparqué el coche en el trabajo, junto a Plaza España y, aún de noche, fuimos subiendo hacia el guardarropa. Se respiraba maratón... llegamos allí y nos empezamos a encontrar con gente.
Los que hemos corrido, o vamos a correr una maratón somos una especie rara dentro del mundo del deporte. Bueno, una más. Que si me pongo esta crema, que si tengo estos ocho geles que me he de tomar en este orden, que si yo siempre desayuno tres galletas y un zumo de piña... Cada maratoniano es más friky que el anterior. Y ese frikismo hace que esto sea de lo más divertido.
Poco a poco fueron llegando más miembros del equipo, saludos, presentaciones, aventurillas, expectativas...
Por fin llegó la hora de hacerse la foto de equipo... uff... vaya delegación WITL? con el boss incluido.
Powerbomb p'adentro y todo empieza entrar en la recta final.

Yo debía entrar en el cajón azul, en la segunda salida. Algunos con los que pretendía compartir gran parte de los kilómetros tenían dorsal para entrar en el cajón rojo y, habiendo cometido el error de no mirar por donde se accedía a cada uno de los cajones, nos fuimos todos hacia el rojo. Los del azul, debíamos retroceder y dar tooooda la vuelta, con lo que (almenos yo) me quedé muy mal ubicado... en la parte de atrás.

Puuum! Salida!! Empezaban a salir los primeros cajones... yo salía 5 minutos más tarde. Dos respiraciones profundas, cierro los ojos y preparado. No hay vuelta atrás y sólo queda disfrutar.
Transcurridos ya 9 minutos desde el primer disparo, consigo cruzar la linea de salida y pongo en marcha el crono. La idea, aunque vaya solo es seguir un ritmo de 5 min/km, de forma que saliera un tiempo final de 3:30. Así fue al principio, algunos más rápidos y otros más lentos, siempre en función de la "densidad de población" y también del desnivel. Como la semana anterior, me encontré muy "divertido", incitando al público a animar a los corredores. En algunos casos incluso lo conseguí.
Me encontré al gran Gerard Vélez, un compañero de facultad con quien había contactado hacía tiempo por Facebook, pero no nos habíamos visto desde entonces. Estuvimos charlando unos metros. Me hizo mucha ilusión volver a verle. Al cabo de un rato, volví a recuperar mi ritmo y lo dejé atrás. Por segunda vez volvía a pasar frente al trabajo. Que tortura, por Dios!! jajaja!
Más adelante alcancé a Carles Esteve, cada día está más fuerte. Saludo, ánimos y a seguir corriendo... aún queda mucho mucho. Iban pasando los kilómetros y, lo único que descentraba mi mente eran los avituallamientos. Mucha gente coge la botella de agua y se pone a andar, o la lanza a sus pies cuando ya no quiere más. Aquí se nota el que piensa en los demás y el que no. Después del primer "incidente", decidí coger la botella de agua, salir del avituallamiento de forma controlada y al cabo de unos metros empezar a beber tranquilamente.

A medida que pasaban los kilómetros iba subiendo la temperatura, y yo seguía a 5 min/km... paso de media maratón a 1:47:43, lo que significaba que había perdido casi 3 minutos sobre el tiempo previsto. ¿Y qué? Las sensaciones eran buenas, no tanto como para incrementar el ritmo, pero sí para mantenerlo. Esto cambió aproximadamente sobre el km 30, cuando empezó a hacer calor de verdad.
Parecía aparecer el famoso muro. Ya lo encontré en el '92... de hecho no recuerdo un buen trozo de la maratón de ese año. Pero no, era bien consciente de que me encontraba bien, sólo que algo pesado y con algunas dificultades para mantener ese ritmo.

En ese momento tomé la decisión de seguir disfrutando y no sufrir. Sólo quedaban 12 km, no creía en los milagros, pero sí en la posibilidad de continuar disfrutando de todos y cada uno de los metros que iba a correr a partir de ese momento. Pasando por la Avda. Litoral, me encontré a Joan Borrás... nos seguía con su bici. Parece ser que el señor que tenía al lado era su padre. Me enteré después. Más adelante aparecía Ricard Sánchez con signos de haberse topado en el muro, estaba bastante tocado. Intenté animarle, pero creo que no sirvió de mucho. Pasé por Arc de Triomf con la piel de gallina... es un punto realmente bonito y mentalmente te resucita o te remata. Seguía disfrutando de cada metro, a un ritmo más bajo... Portal de l'Àngel, la Catedral, Rambles, Colón y... Paral·lel. Al fondo se veía bien clara la fuente de Plaza España, la meta. Esa vista da un subidón moral imporante, casi tan importante como la subida que tiene la Avda. Paral·lel. Cada pocos metros empezaban a aparecer corredores haciendo estiramientos, andando, realmente rotos... a todos y cada uno de ellos les dí ánimos. Sabía que una vez allí, mis hijos estaban esperándome para entrar en meta cogidos de la mano. Mientras escribo esto, alguna lágrima se escapa.
Justo antes de entrar en Plaza España están ellos esperándome, los dos motores de mi corazón. Quedan aún 300m, y empezamos a correr, a andar, a reir... poco a poco íbamos pasando los arcos de los distintos patrocinadores, y acercándonos a meta. Un arco más y llegamos!!

Debajo de las gafas de sol caían las lágrima de alegría, mientras paraba el crono el 3:44:35. Nos unimos los tres en un fuerte abrazo que espero repetir en un par de meses... en Calella.
Para finalizar la jornada, nos dirigimos al guardarropía... nos reunimos de nuevo con los miembros del team WITL? y tras comentar la jugada nos fuimos a casa.
Veinte años más tarde he vuelto a ser maratoniano, corriendo por una ciudad preciosa que me ha visto crecer desde que llegué a ella con 19 años. Ya en casa encontré el recuerdo de aquella maratón del 92...
Es cierto que correr una maratón es para estar orgulloso, llegar en buenas condiciones a meta es para estar más que contento y sobretodo, entrar con tus hijos a meta es algo que puede catalogarse de único, una sensación difícil de explicar. Todo esto me hace feliz, y algunos ya sabéis que a veces, mi felicidad la expreso de una forma un tanto sosa. Mi vida ahora sigue siendo una maratón, una tras otra... y por ello, el mismo lunes empecé a mirar cuál sería la siguiente. Valencia? San Sebastián?




domingo, 25 de marzo de 2012

Marató de Barcelona, faltan pocas horas...

Mañana, luego... en pocas horas se da la salida de la Marató de Barcelona. Veinte años después, habiendo transcurrido toda una vida, llena de alegrías, voy a repetir esta carrera. En el 92 yo era un crío, 18 años, tenía pelo, no recuerdo qué sentía... ahora me siento bien, soy feliz, creo que en esta vida ya lo he conseguido todo, y para mí, cualquier paso adelante es un regalo que me hago a mí mismo.

En este post, voy a dedicar todos y cada uno de los kms de mañana a alguien. En algunos casos pondré los motivos, algunos me los reservaré, muchos de los que aparecen quizá no saben que se lo dedico, quizá nunca lo sabrán... pero ahí están:

km 1 a Laura, porque todo lo que tengo es gracias a tí
km 2 a Àlex: mi querido hijo, t'estimo reiet!
km 3 a Natàlia, mi niña, mi princesa... t'estimo bonica!
km 4 a mi hermana María
km 5 a mi mami, papi, Emi... gracias por estar a mi lado
km 6 a David Giró, por estar ahí en los momentos difíciles
km 7 Tore, gran amigo, mejor persona... genial
km 8 Aureli, sempre un gran amic
km 9 Judith, luchadora y WITL team rider
km 10 al resto de princesas del team Ada, Vanessa, Cristina, Sonia, Deborah, Gemma, Soraya...
km 11 a Buxeda, Almeda y Marsal, por su gran trabajo
km 12 a Josef Ajram, por liarla así
km 13 a los que día a día, poniendo obstáculos, me hacen más fuerte
km 14 a Lorena Martí, por su impagable amistad y sinceridad
km 15 a Jordi Geronès y Jero Vargas, grandes compañeros, grandes amigos
km 16 a mi equipo Jordi, Dani y Mari
km 17 a Mireia
km 18 a Ivan Lugo, genial
km 19 a Rosa Mª Plana, mi terapeuta... mecánico y estilista de emociones
km 20 a Pep Sánchez, crack del team y seleccionado en el Epic 5
km 21 a Gonzalo Marchena, recupérate pronto eh?
km 22 a la pequeña gran Elena Martínez, fisio, entrenadora de natación
km 23 a Ignasi y Lara, increibles
km 24 a Robert y Mariana, geniales
km 25 a Xavi y Noe, únicos
km 26 a Ferran y Leo
km 27 a Oscar, Toni, Vicente, Duque y resto
km 28 a Àlex, Pau, Leila, Anayansi, Rafa Bucciero... del Metropolitan Las Arenas, por su gran trabajo y a los compañeros de spinning y del running por compartir los entrenos conmigo
km 29 de nuevo a mis hijos Àlex y Natàlia... ya queda poquito para llegar a meta
km 30 a Judit, mi osteópata
km 31 a tí, que aún no te conozco, pero estás ahí...
km 32 a Javi, Raúl y Francesc... con Spiridon y Podopie
km 33 a Jordi Martínez, que me suplantó en el Garmin del año pasado... un tipo genial
km 34 a Fran Izquierdo, Jordi Lladó y todos los que siguen corriendo por la montaña, volveré!
km 35 a los que no aparecéis en esta lista, pero sabéis que estáis en mi agenda, en mi Facebook, en mi Twitter... gracias por estar ahí
km 36 a Robert Mayoral
km 37 a mis compis de equipo en la Marató, Luca, Ricard, Carles, Andreu, Toni...
km 38 al resto del equipo Where is the Limit? por vuestro apoyo y motivación
km 39 al resto del equipo Where is the Limit? por vuestro apoyo y motivación (es que somos muchos!)
km 40 a mi vida pasada, nada que reprochar
km 41 a mi presente, subiendo hacia arriba con una sonrisa
km 42 a mi futuro,
y los últimos 195m me los dedico disfrutar y tener el placer de correr los últimos metros con mis hijos y llorar plácidamente como la primera vez que crucé la linea de meta en Valencia, hace 20 años.

Gracias a tod@s por estar ahí... en 8 horas empieza la fiesta!!

sábado, 24 de marzo de 2012

De momento, asfalto...

En estos últimos días mucho trabajo y metiendo entrenos a horas intempestivas, he tenido serias dificultades para encontrar un hueco y continuar con el blog. Bueno, aquí estamos...

El inicio de 2012 ha sido más que satisfactorio. Me puedo permitir una buena sonrisa. Bueno, la sonrisa no sale así de la nada. Diría que los principales motivos se llaman Àlex y Natàlia. Son geniales, cada vez nos lo pasamos mejor en los pocos ratos que estamos juntos. Creo que en lo que llevamos de año todavía no han dormido en su cama, jejejeje! Así tengo yo la espalda!!

Este estado de ánimo me ayuda a entrenar, a disfrutar de todo lo que hago.
El asfalto está volviendo a llamar mi atención y ya que el objetivo es pasarlo bien, no vamos a hacerle un feo.
La Mitja de Granollers estaba destinada a ser una carrera relajada, sin presión y esperando hacer 1:50.
Simplemente haciendo una tirada larga, para sumar metros de cara a la Maratón de Barcelona.
Ya la había corrido hace 20 años en 1:33, con 12 kms de calentamiento. También preparando las maratones de 1992.
Ya en el presente, mi sorpresa fue cuando iban pasando los kilómetros y el pulsómetro marcaba los parciales. Rodaba a un ritmo inesperadamente rápido y con unas sensaciones bien cómodas. Pasé el km 10 con 47 min. Visto que estaba cómodo, decidí continuar con la misma sensación... sin forzar la máquina, y teniendo claro que llegaba el tramo de bajada. El ritmo por km bajó entre 5 y 10 segundos. Finalmente me planté en meta con un tiempo de 1:39. Contentísimo...

A mediados de febrero, la intención era participar en el Duatló del Prat. Un duatlón por equipos, campeonato de Catalunya. El asunto de las inscripciones fue complicado, incluso algo polémico... finalmente no pude participar. Pero sí que fuimos una buena representación del team a animar. Where is the Limit? parcipaba con dos equipos. Ese día conocí en persona a gran cantidad de gente: Thomas, Pep, Nico, Judith, Sergi, y unos cuanto más. Parecía que nos conocíamos desde hacía tiempo.
Al día siguiente en La Pineda (Tarragona) había una carrera de 10km. Hacía unos días había convencido a Judith para correrla. Aproveché para dormir en casa de mis padres, en Tarragona y de paso hacerles una visita. Por la mañana, bien pronto salí de casa. Mochila, buff, gafas de sol, camiseta térmica y me fuí corriendo hacia la línea de salida. Fueron unos cómodos 8 kms. Mi idea (esta vez sí) era hacer una tirada larga de unos 20 kms a un ritmo tranquilito, por lo que me podía permiir tirar un poquitín de Judith. La acompañé y empujé durante 56 min. Plenamente satisfecho por ayudarla a mejorar su marca.

El siguiente reto, la Maratest 30km se avecinaba. Sólo me molestaba el hecho de que fueran dos vueltas. Nunca me ha gustado dar vueltas a un circuito, por muy entretenido que pudiera ser. Ricard  y yo habíamos pensado hacer de liebre a Ada y Vanessa en la primera vuelta. Pero justo antes de la salida nos perdimos, de modo que salimos sin ellas. Nos posicionamos tras el corredor de referencia a 5 min/km. Íbamos arañando algunos segundos a medida que iban pasando los kilómetros. Sobre el km 20, empecé a ir algo cansado, y prefería relajarme un ratito. Ricard se fue alejando poco a poco. Yo me reenganché de nuevo al grupo, y me dejé caer un poco más, llegando a aburrirme bastante en los kms 26 y 27. Algunas calles eran laaaaaargas y solitarias, nada motivadoras. Fueron un par de kms tontos. Luego me recuperé y pude mejorar el ritmo de nuevo, llegando a meta en 2:30 y de este modo habiendo conseguido el objetivo inicial.

domingo, 4 de marzo de 2012

2012... el Team WITL? y los primeros retos

Finalizando un 2011 lleno de motivación, la entrada en el nuevo año prometía ser interesante.
En algún momento de algún entreno, con velocidad de crucero y piloto automático, empezaron a pasear por mi mente una serie de recuerdos... gratos recuerdos. Hace ya 20 años que corrí mis dos primeras y únicas maratones hasta el momento: Valencia y Barcelona. Por un momento pensé que estaría bien repetirlo... pero solo por un momento.



Llevaba unos días pensando en meterme en algún equipo, por aquello de que las cosas fueran algo más organizadas y conocer gente. En Facebook vi que algo estaba moviéndose en torno al equipo Where is the limit?. Sigo a Josef Ajram ( http://www.josefajram.es/ ) hace tiempo y, aunque a veces hay actitudes que no me gustan, me parece una buena filosofía. Dudé bastante, pues no conocía a nadie. Solicité información, busqué algo por lo que no hacerme del club. No encontré ningún motivo, al contrario... Envié mis datos.

Rápidamente empecé a conocer a gente del equipo via Facebook. La actividad del grupo era frenética. Recibir un "buenos días" con el mensaje de motivación más original hacía que día a día me fuera animando.

Empecé inscribiéndome a la Maratón de Barcelona, Maratest 30km. Casualmente crearon 700 dorsales solidarios para La Mitja de Granollers... hala, otra más.

Y finalmente, la gran locura: Half Challenge Calella, el 27 de mayo.
Mi único temor es la natación. Charlando con mi fisio Elena (experimentada nadadora) vi que podía hacerlo. El primer día en meterme en la piscina fui capaz de estar una hora nadando. De 100m en 100m, lento y tragando agua, pero 1 hora. Estoy absolutamente convencido de que lo puedo hacer. Y si salgo del agua, llegar a meta será seguro. En tierra firme me defiendo, sé lo que es sufrir y la verdad, me da igual porque se que llegaré con una sonrisa y de la mano de mis hijos. Así que, vamos allá!

A continuación os pongo el "manifiesto" que podéis leer en la web de http://www.whereisthelimit.com/ , frases con las que me identifico, me motivan y me hicieron decidirme por ser un Team Rider WITL?
¿Qué es Where Is The Limit?Where is the límit? es mucho más que un logo, marca, imagen, frase o texto.
Where is the límit? es dar una pedaleada tras otra cuando crees que ya no puedes más. Es dar una zancada más cuando tus piernas te piden parar. Es llegar a una meta que creías imposible. Es llorar de sufrimiento y no desfallecer. Es dar una brazada, otra y otra, en medio del océano. Es fijarte un objetivo y darlo todo para conseguirlo. Es dar ese salto que creías imposible. Es remar hasta lugares insospechados y sentir tus brazos explotar. Es luchar contra tus pensamientos cuando todo se vuelve negro. Es demostrarte que siempre se puede más y más. Es andar y cruzar montañas sin pensar en lo mucho que te duelen los pies. Es pensar en llegar sin pensar en no llegar. Es bajar por pendientes que los demás ven como precipicios. Es escalar más arriba de lo que nunca habías soñado. Es descubrir dónde NO está tu límite y poder decir que todavía NO sabes donde está! Es motivar, animar y ayudar a que los demás se superen a sí mismos…
Es una filosofía de vida, una manera de vivir! Y tú… ¿Eres Where Is The Limit?